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Pasión y homicidio Roxana había dejado la escuela, pero era una joven trabajadora y de buen corazón. Tenia un poco de complejos porque su nariz era un poco chata, pero su cuerpo formidable y sensual, le daba la seguridad de conquistar casi a cualquier hombre. En su trabajo era acosada constantemente por clientes que al verla, siempre la invitaban a salir. Sin embargo, ella nunca acepto; pues tenía la esperanza de que Carlos, su jefe, dejara a su novia y se fijara en ella. Juan era un vecino de condición “sencilla” que vivía enamorado de ella. La invitaba a salir y ella no aceptaba. Le compraba regalos pero estos no eran suficientes para ganar su corazón. Sus “amigas” le decían, que no era posible que no tuviera novio con tantos pretendientes; cuando ellas en su lugar tendrían más de uno. Y tanta fue la presión de ellas, que termino aceptando al pobre Juan. Cuando alguien hace cosas malas, inconscientemente busca que las demás personas también las hagan, para no sentirse… tan mal. Y este era el caso de las “amigas” de Roxana; pues ahora le decían que, era una anticuada por el hecho de ser virgen a los 18 años; que se estaba perdiendo lo mejor de la vida, por su ridícula forma de ser. Otra vez Roxana no soporto la presión, y tuvo relaciones íntimas con Juan. Sin imaginar si quiera, que el fruto de su decisión le provocaría un retraso menstrual de más de un mes. En ese momento, ella pudo detenerse a pensar, que las cosas fuera de orden y tiempo, siempre tienen consecuencias malas. Y empezar a buscar gente buena que le diera consejos para el reto que ahora enfrentaba. Pero en lugar de eso, siguió tomando malas decisiones. Pensó: si le digo a Juan, se va querer casar conmigo y yo no lo amo. Si le confieso todo a mi padre, me matará. Si seduzco a Carlos y me acuesto con el, le puedo hacer creer que el hijo es suyo y lo obligo a casarse conmigo. Y eso fue lo que hizo, o al menos, lo que intento. Carlos también era un buen trabajador, pero débil ante las mujeres. Así que cayo en menos de una semana en la trampa de Roxana, quien le puso a Carlos como condición para entregarle su cuerpo, que no usara preservativo… Como Carlos era un hombre con cierta experiencia, se imagino lo que estaba pasando y le siguió el juego con tal de obtener un poco de placer “gratis”; pero que al final de cuentas, le termino costando su trabajo, pues lo despidieron cuando se supo que el estaba negando el embarazo. Por más que Carlos le dijo que, sabia que todo era una trampa, ella no dio un paso atrás, e hizo uso de cuanta manipulación le fue posible, para persuadirlo a casarse con ella. Incluso, cuando se reunían para hablar sobre el tema. Se iban a un hotel a pasar un momento de pasión, antes de la discusión. Pero a pesar del placer que la chica le brindaba, Carlos se negó rotundamente a aceptar la paternidad de un hijo que no era suyo. Y ella por su parte, prefirió cualquier cosa, antes que decirle la verdad a Juan sobre su hijo. Y fue así… bajo ese contexto. Bajo esas presiones. Por culpa de esa tan irresponsable forma de vivir… que se cometió el homicidio. Roxana volvió a pedir el tonto consejo, de sus tontas amigas. Y fue por ellas que acepto ir a una clínica; que en lugar de clínica, se debió llamar “lugar de la muerte”. Y la atendió un doctor, que en lugar de doctor, su título pudo ser sustituido por “asesino”. Y pago para que le efectuaran un aborto, lo cual, es lo mismo que decir que pago, para que mataran a su hijo; al hijo de Juan. Estados Unidos es el país más desarrollado del mundo, y sin embargo tal crimen es permitido por la ley. Que irónico, existe una ley que multa con $5,000 para cualquier persona que rompa, destruya o robe el huevo de un Águila Americana. Pero quien mate a un bebe, siempre y cuando este dentro del vientre de la madre, no solo NO es multado, sino que puede cobrar por tal acción. De hecho, la industria del aborto, mueve alrededor de 420 millones de dólares al año. Llorar por la gente que murió en Las Torres Gemelas, a causa del Tsunami ó en la reciente tragedia de Nueva Orleáns, y no llorar por los bebes que han sido abortados… ¡es incoherente e inaceptable! ¡Pues ni en esos eventos, ni en El Holocausto Nazi, ni en todas las guerras del mundo, ha muerto tanta gente, como ha sucedido con los bebes abortados! Si estas considerando abortar, en el nombre de Jesús te digo: no lo hagas. Si conoces a alguien que lo piensa hacer, aconséjale. La Biblia dice en Éxodo 20:13 No matarás. Escrito por: Melvin Chacón Instructor de Noviazgo y Sexualidad Por el Instituto de Lideres Integrales. Miembro de Iglesia del Nazareno en Panorama City. (818) 904-0398 melvin.chacon@musife.com |
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